Sorrento es una terraza al mar de encanto elegante, entre limoneros, mar azul y callejones históricos. Es famosa por sus atardeceres sobre el Golfo de Nápoles, el aroma de los cítricos y la artesanía local. Un destino perfecto para quienes buscan cultura, relajación y romanticismo.
Capri es sinónimo de belleza mediterránea: los Faraglioni, la Gruta Azul, jardines y terrazas sobre el mar hacen de la isla un ícono internacional. Une naturaleza, lujo, tradiciones y vistas soñadas, tanto en el animado centro de Capri como en la auténtica Anacapri.
Positano es la perla vertical de la Costa Amalfitana, un pueblo colorido que desciende abruptamente hacia el mar. Sus escaleras, talleres artesanales y playas hacen de este lugar uno de los destinos más fotografiados y queridos de Italia.
Amalfi, antigua República Marinera, es una joya de historia y espiritualidad, dominada por la imponente Catedral de Sant’Andrea. Entre callejones, escaleras y panorámicas impresionantes, ofrece una mezcla perfecta entre mar, cultura y arquitectura medieval.
Ravello es un balcón sobre la Costa, suspendido entre el cielo y el mar, conocido por sus jardines y villas históricas como Villa Rufolo y Villa Cimbrone. Meta de artistas e intelectuales, es un lugar de paz, arte y belleza.
Pozzuoli es el corazón de los Campos Flégreos, una tierra volcánica y fascinante que une historia, ciencia y mito. Cuenta con un rico patrimonio arqueológico, como el Templo de Serápis, el Barrio Terra y el imponente Anfiteatro Flavio, el segundo en tamaño después del Coliseo. La ciudad se encuentra entre fumarolas, mar y restos romanos, ofreciendo una atmósfera única.